martes, 23 de marzo de 2010

"A Guillermo Tell le toca la manzana en la cabeza"

Con todo el respeto que nos merece el proceso revolucionario cubano, nos parece que hay que revisitar ciertas prácticas y conceptos. Dejo con ustedes una canción dedicada a Fidel Castro, que vale la pena ser escuchada como "metáfora social"... pueden comentarla, si lo desean.

2 comentarios:

  1. He admirado la Revolución Cubana y a los protagonistas conocidos como desconocidos de aquella gran revolución popular.
    Una Revolución cuando es apoyada por el pueblo es exitosa siempre, los guajiros cubanos hicieron notar su descontento y se unieron a las columnas de Guevara, Cienfuegos, hermanos Castro etc.
    Pero todo esto pasó hace 50 años, una revolución muere cuando se estanca.
    Es una muy buena metafora la de Carlos Varela. El pueblo se reveló contra un padre, o más bien digo un padrastro como lo fue batista, ahora han tenido un padre desde 1959, eso es mucho tiempo, quizas necesitan salir del nido y volar por su cuenta, quizas necesiten pasar del cuidado del pater familia de la Res Privata a la Res Pvblica y decidir ellos quienes deben ser sus gobernantes, creo que han tenido una excelente educación como para poder decidirlo de manera madura y responsable.

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  2. Hay que tener cuidado quien se queda con la ballesta si es el pueblo cubano o son los mismos que bombardean Afganistán. La educación del pueblo cubano es una habilidad para controlar su ballesta, pero el imperio norteamericano tiene armas sucias, corrompe lideres con los chacales, financia sediciones, controla medios de comunicación, etc.
    Tarde o temprano Cuba tendrá que elegir su gobierno y la forma en que éste ejerce el poder, ojalá lo haga bien.
    Y cuidado con criticar tanto a Cuba ya que como dice Charles Bukowski “La diferencia entre una democracia y una dictadura consiste en que en la democracia puedes votar antes de obedecer las ordenes.”. En Chile la democracia es un chiste la discusión en serio se hace en grupos pequeños que no tienen ninguna incidencia en las decisiones importantes, la gente común no tiene opinión, sólo repite lo que le dice la TV. Veamos la viga en nuestro ojo y no la paja en el ajeno.

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